La célula es lo más pequeño que existe que tiene vida y por eso es el elemento principal para estudiar a los seres vivos. Pero debes tomar en cuenta que no todas las células son iguales, estas se clasifican principalmente dependiendo de si tienen núcleo y por su forma de alimentación.
Para poder entender mejor las diferencias entre los distintos tipos de células, te recomiendo ver antes la célula y sus partes. ¿Ya estás listo? ¡Sigamos con la clasificación!
Las células se dividen en dos grandes grupos: procariotas y eucariotas.
CÉLULAS PROCARIOTAS
Estas son las células más sencillas y pequeñas que existen. Las primeras células que surgieron en nuestro planeta eran procariotas y todas ellas son unicelulares. Pero, ¿cuáles son sus características?
Célula procariota y sus partes |
Pues la principal característica de las células procariotas es que su material genético no está dentro de una membrana, sino que se encuetra en una región especial del citoplasma llamada nucleoide. Además los ribosomas se encuentran esparcidos por todo el citoplasma.
Tampoco los organelos de estas células están cubiertas con membranas. La única membrana de las procariotas es la membrana plasmática que la separa del medio exterior. Cabe también destacar que su membrana plasmática está cubierta por otra protección llamada cápsula y esta última también está protegida por una pared celular.
Las bacterias y las archeas son los grandes grupos que se caracterizan por estar formados por células procariotas.
CÉLULAS EUCARIOTAS
Estas son mucho más desarrolladas y alrededor de diez veces más grandes que las procariotas. Las células eucariotas poseen su información genética o ADN dentro de una membrana llamada núcleo celular. Además, posee más organelos en su citoplasma, los cuales son más complejos y también poseen membranas. Si no sabes qué son los organelos, puedes averiguarlo AQUÍ.
Otro aspecto importante es que los ribosomas de las células eucariotas se ubican en el área del Retículo Endoplasmático Rugoso, el cual es uno de los organelos que rodean el núcleo.
Todos los animales, plantas, hongos y protozoos poseen células eucariotas. Es decir, estas células pueden ser un organismo unicelular (protozoos y muchos hongos) y también pueden unirse para formar un ser vivo pluricelular (animales, plantas y algunos hongos).
Las células eucariotas se subdividen a su vez en células animales y células vegetales. Las cuales se diferencias por el modo en que obtienen las sustancias que les sirven de alimento para conseguir energía.
CÉLULA ANIMAL
Es heterótrofa, esto quiere decir que necesita obtener materia orgánica ya elaborada para alimentarse y producir energía. Por tanto, sus fuentes de alimento provienen de otros seres vivos.
Por ejemplo, el ser humano está formado de células eucariotas. Nosotros comemos a otros animales y plantas y las moléculas orgánicas que forman a esos animales y plantas son descompuestas por nuestro sistema digestivo y metabólico para que puedan ser usadas por nuestras propias células.
Otra caracterísica es que las células eucariotas no poseen pared celular. Además, las vacuolas funcionan principalmente para sacar desechos hacia fuerta de la célula.
CÉLULA VEGETAL
Es autótrofa, lo que significa que no necesita consumir otros seres vivos para conseguir alimento porque puede crear su alimento usando a luz del sol. ¿Cómo es esto posible? Pues porque las células vegetales poseen unos organelos especiales llamados cloroplastos, los cuales poseen un pigmento verde llamado clorofila que absorben la luz solar y su energía para crear las moléculas orgánicas que la célula necesita; este proceso se llama fotosíntesis. Todas las plantas poseen clorofila para realizar la fotosíntesis y por eso suelen ser de color verde, en especial las hojas.
Estas células también se caracterizan por tener una pared celular, la cual tiene una consistencia dura que le permite protegerse y mantener su forma. Además, las vacuolas son mucho más grandes que en las células animales y tienen función de almacenar agua.
¿Qué pasa con los hongos y los protozoos?
Pues ya aprendimos que pertenecen al grupo de las células eucariotas, pero digamos que los hongos y los protozoos son un poco raros, pues ellos no son si plantas ni animales, pero tienen algunas características de ambos.
Las células de los hongos tienen pared celular, pero de una sustancia llamada quitina. Los hongos no se mueven y crecen como si fueran plantas, pero no son autótrofos, sino heterótrofos.
Por otro lado, los protozoos son como animales unicelulares microscópicos, pero muchos pueden relizar la fotosíntesis. Por sus funciones tan confusas, no se consideran vegetales ni animales.